Paco el inventor

Comparto un bello testimonio enviado por una gran amiga que le permitió la experiencia del amor incondicional de ayuda a una persona próxima a partir y como ella dice "lo que paso le infundió una visión de la muerte que hasta entonces no percibía". Gracias Gemma
Yanette, acabo de leer en tu blog: El arte de abrir el corazón, que Antonio ha partido. 

Voy a encender una vela para el. 

Esta lectura me ha remitido al día 10 de agosto de 2011 día en que me despendí de mi amigo Paco el inventor (como yo lo llamaba).Contaba 81 años.

Voy a transcribirte, si me lo permites, nuestra última conversación verbal amparados a la sombra de un olivo de su jardín. Fueron dos horas intensas y de gran valor para mi.(después de la fecha de su partida han venido otro tipo de conversaciones...)

Aquella tarde me habló de las partículas y del TODO y justo en aquel momento el silencio nos invadió y la conexión de almas... indescriptible. 

Me dijo: que corriente más fuerte hemos vivido. Me miró a los ojos y continuó diciendo: Tu has sentido paz y así fue la paz me inundaba. Silencio. Retomo la palabra y con una voz potente dijo: Te lo digo con confianza yo me quiero morir ya he terminado mi trabajo y estoy en paz.

¿Tienes miedo Paco?pregunté timidamente. De ella no, respondió, que venga cuando sea la hora(unos días antes tenia la incertidumbre del cuando).

Para mi escuchar tanta sabiduría y poderlo acompañar un poquito fue un magnifico regalo.

Me acerque y le susurre al oído: Te quiero. Me marché a casa pidiendo al Universo que fuera condescendiente y le otorgara una partida rápida pues orgánicamente se encontraba incomoda por el dolor. A los pocos días ya había partido. 

Al cabo de una semana mientras observaba la salida del sol en la montaña lo sentí cerca. Justo delante de mi vi volar una abeja y entonces pregunté: ¿Estas bien Paco?De pronto la abeja se posó sobre la manga de mi chaqueta verde. Cuando esta se quedó inmóvil durante un tiempo(?) supe que el bello insecto llevaba consigo la respuesta a mi pregunta. Paco era un gran amante de la Naturaleza y en el huerto ecológico donde cultivaba todo tipo de verduras y frutas esquisitas había pactado un acuerdo con los insectos respetandolos y dejando que cumplieran su función dentro de la cadena trofica y jamas tuvo ninguna plaga.

Lo que te acabo de revelar me infundió una visión de la muerte que hasta entonces no percibía.

Gracias por escucharme.

Un fuerte abrazo.

Gemma